Dolor en busca de belleza...

 

Mientras caía la tarde con lágrimas en los ojos y cara de desesperación, postrada en una cama y padesiente de dolor se encontraba Milba  luego someterse a una cirugía estética días antes. Al acercarse a ella se podía escuchar como con una voz desolada sus labios pronunciaban una y otra vez “Si esto es ahora, que será en la noche”, mientras recibía el consuelo de una señora quien con cara de impotencia se mantenía a su lado tornándose un ambiente de solidaridad y empatía por parte de la acompañante.

 

A medida que las horas pasaban su angustia crecía y el temor a la llegada de la noche se hacía más notable, pues para la padesiente en esta era donde su dolor aumentaba y el tiempo transcurría más lento, aun  esta se suministrara los costosos medicamentos.

 

Pasada las 9:00 P.M. se puede observar como Milba poco a poco se queda dormida pese a su temor por la noche. Por lo que su acompañante decide recostarse para llenarse de fuerzas y aliento ante la situación, pues la misma sabe que aunque la padesiente se había dormido, esto sería pasajero y al despertar la situación empeoraría.

 

Una vez llegada las 11:00 P.M empiezan las quejas de calambre en las piernas, minutos más tarde su cuerpo se empieza a humedecer y la tensión aumenta, pues es el comienzo de lo que será una de las tantas noches después del proceso quirúrgico.

 

Se puede observar la tristeza en el rostro de la acompañante, su empatía y afecto por la doliente, sumándole a esto la impotencia de no poder ayudarla se apoderan su cuerpo y esta solo decide acostarse a su lado y acariciarle el cabello, pues más no podía hacer.

 

Las quejas de dolor no se hacen esperar, minutos más tarde se puede palpar como bajan gotas de agua humedeciendo el rostro de Milba, quien serenamente intenta resignarse al dolor y no mostrar su sufrimiento para no desatar nervios y angustia a su acompañante. Pese al dolor padecido, las largas noches de desesperación y el dinero gastado, esta se refugia en la idea que de eso es momentáneo y el resultado de dicha situación será para siempre, por lo que considera tal momento como un dolor en busca de belleza.